Hola!!! Buenos días, buenas tardes o buenas noches, no sé cuándo leerás esto, así que lo escribo todo!
Este es un mensaje de ánimo para tí. No nos conocemos, pero yo pienso mucho en tí y en todas las personas que estáis en esta complicada situación.
Pienso en lo difícil que tiene que ser y en lo que deseo que te cures pronto, que salgas y que volvamos a disfrutar de la vida como antes.
Yo mientras tanto me quedo en casa por todos vosotros y pidiendo cada día que esto acabe pronto y que todos juntos salgamos de esto más fuertes que nunca.
Mucha mucha fuerza y ánimo de todo corazón.
Un abrazo virtual con todo el cariño del mundo,
Beatriz, desde Zaragoza.
Querida amiga o amigo:
Lo primero y casi único que quiero darte es un abrazo…el abrazo más próximo, más fuerte, más estrecho, más prohibido en estos días, que sea capaz de transmitir todo mi ánimo, todo mi apoyo, toda mi fuerza y esperanza.
Sin dejar de abrazarte te digo que no estás solo, ahora mismo te están rodeando varios círculos giratorios que generan una fuerza imperceptible pero poderosa que conseguirá sacarte de allí. El primero y más cercano está formado por los excelentes profesionales sanitarios que se dejan el alma para curarte. En una órbita exterior están tu familia, tus amigos, las personas que te quieren, todos ellos pensando en ti, y sobre todo esperándote, preparándolo todo para tu regreso. El último círculo lo formamos el resto, personas a las que no conoces y que no te conocen, anónimas, pero que quieren ponerse en tu lugar, quieren agarrar fuerte tu brazo y traerte de nuevo con nosotros.
En estos días encerrados nos angustiamos, porque nos gustaría hacer algo más por ti. A mí me ayuda recordar lo importante, las cosas que pronto disfrutarás… La conversación con un amigo, que te acaricia alma y recuerda lo mejor de ti, la luz del atardecer, la intimidad con quien amas, el agua templada del Mediterráneo, el frio en la cara y la satisfacción desde una cumbre del Pirineo… todo esto te está esperando, no lo olvides.
Quiero pensar que muy pronto, cuando salgas, pasearás por la calle, disfrutando entre la gente, y de pronto, cruzarás la mirada con unos ojos que te sonreirán cómplices, esos ojos podrían ser los míos, un ciudadano anónimo que ahora está pensando en ti y sin dejar de abrazarte susurra:
¡Ánimo amigo/a, lucha! ¡Te estamos esperando! ¡Tienes tanto por vivir!
Hola querido amigo,
Este es el último empujón, ¡ya no queda nada! En menos de lo que tu te esperas ya estarás de nuevo en tu casa con tu familia. Porque sí, los datos ya son muy esperanzadores y todo indica que ya queda poco para que ganemos esta batalla.
Han sido muchos días de incertidumbre, tristeza y agonía. Pero también han sido días de solidaridad, reflexión y cariño. No hay mal que por bien no venga. Seguro que este tiempo te ha servido para reflexionar y valorar algunas cosas que igual antes no nos dábamos cuenta de lo importantes que eran. Ya bien sea un abrazo, un qué tal estás o incluso el simple gesto decir más te quiero.
Todos estamos llevando una cruz a cuestas en esta pandemia, ya sea por una cosa u otra. Pero lo que está claro es que tanto vosotros, como todo el equipo sanitario que os cuida sois HÉROES. Por eso no nos cansaremos de aplaudir todos los días, por eso no pararemos nunca de rezar por vosotros y por eso vamos a conseguir salir de esta.
Si me permites, me encantaría poder darte un consejo, y es que para mí la música está siendo mi vía de escape. Todos los días dedico un tiempo del día a escuchar música y dejar mi mente despejada. Te lo aconsejo, porque salen pensamientos realmente increíbles y psicológicamente desconectas de todo lo que te rodea.
Por favor, nunca lo olvides. ESTAMOS CON VOSOTROS.
Desde tierras mañas quiero mandarte un caluroso y cariñoso abrazo. Juntos vamos a salir de esta más pronto de lo que esperas. Mucho ánimo y recuerda, ya queda menos para comerte el mundo.
¡Resistiremos valientes!
Tu amiga maña.
Querido enfermo:
Me llamo Araceli. No sé si me estoy dirigiendo a un hombre o a una mujer, a una persona joven o adulta a un enfermo grave o a otro que no lo está tanto. Lo que sí puedo decir es que mi mensaje sería el mismo para todos: tranquilos, lo único que estáis viviendo es un mal sueño, una especie de pesadilla en la que vosotros sois los protagonistas, una especie de película surrealista que por arte de birlibirloque se ha hecho realidad. Yo tb viví una pesadilla de este tipo cuando tenía 7 años. Debido a una meningitis me dieron sólo un 5% de posibilidades de vivir… Ahora tengo 56, estoy casada y tengo 2 maravillosas hijas. Como siempre dice mi madre, no era mi momento todavía, como tampoco lo es el vuestro. Cuando echo la vista atrás me doy cuenta de lo afortunada que fui por poder superar esa pesadilla, por la excepcional oportunidad que me volvió a dar la vida y por la que aún no he dejado de dar gracias. Vosotros todavía estáis en ese momento de oscuridad en el que tenéis miedo, incertidumbre, inseguridad pero ….. yo os puedo decir que os agarréis como yo me agarré a esa esperanza, a esa luz brillante que existe al final del túnel. Porque de las enfermedades se sale, ya lo creo que se sale y además renovados, con más fuerzas con más ilusión por la vida y con mucho agradecimiento… agradecimiento a todas estas personas que están luchando con y por vosotros todos los días, esos ángeles sin alas que no van a dejar que caigáis, que os van a empujar a mejorar con esa sonrisa, con esas palabras que necesitáis en los momentos de bajón… porque sois humanos y esos momentos existen… y son tan difíciles de evitar… Pero esto va a ayudaos, a vosotros y a los vuestros, vais a sobrevivir a algo que nadie esperábamos y que nos ha cogido a todos por sorpresa. Pero como alguien dijo para eso están los retos para superarlos y eso es lo que estáis haciendo vosotros saltarlos y superarlos, un día más en la vida un día más cerca de vuestra cura.
Yo os aconsejaría paciencia, mucha paciencia y que tengáis muchos pensamientos positivos. Intentad recordad algo de vuestro pasado que os hizo felices: la primera vez que descubristeis un amanecer, el primer beso con la persona amada, esa bonita sorpresa que os dieron y que no esperabais, ese paseo por la playa o por el pueblo hablando con un ser querido, la sonrisa de un niño,…… Son tantos los momentos que quizá olvidasteis pero que se vienen a asomar ahora otra vez!! Dejadlos entrar en vuestras vidas de nuevo porque eso os ayudará a superar esta especie de viacrucis por el que estáis pasando. Recordarlo todo y dejad que poco a poco la vida fluya y que un día al final podáis oír eso de YA ESTÁ CURADO, PUEDE IRSE A CASA!!
Un beso enorme para ti, mi enfermo anónimo.
¡Hola desconocido o desconocida!
Ya sé que soy una desconocida para ti y tu un desconocido para mí, sin embargo, estoy segura que nos parecemos más de lo que los dos pensamos.
Una de las cosas que nos une es la fuerza interior. Estoy aquí para recordarte que todo el mundo tiene la suya y tú también.
Búscala, encuéntrala, mira dentro de ti. La vida te ha ido regalando miles de instantes que llevas en el corazón, en el pensamiento. Están aquí, utilízalos para iluminar este camino que ahora puede ser oscuro. Un momento de alegría, una caricia, un beso. Un rayo de sol, la brisa en la cara o aquella canción. Un abrazo de tu madre, poner los pies en el agua del mar, olor a tierra mojada o hierba recién cortada. Aquel café con algún amigo, aquellos chistes del compañero de trabajo ... Cualquier fotografía que te haga sentir bien, que te haga sonreír.
Es el momento perfecto para encender tu luz, tu fuerza interior. Sólo cree en ti, y en el que llevas dentro. En momentos difíciles, muy difíciles como el que estamos viviendo ahora, solemos tener la sensación de que no podemos más, que nos faltan fuerzas, que es imposible. Y entonces alguien nos recuerda que cree en ti, en tu fuerza, sabe que puedes un poquito más y te recuerda que lo puedes hacer, que podemos salir de esta. Solamente es necesario que alguien te dé un toque, y seas consciente. ¡Y sí, claro que sí! puedes un poquito más. Estoy aquí para recordarte que puedes, que eres mucho más fuerte de lo que crees, yo lo creo y tú ahora que lo sabes, también te lo puedes creer; porque en el fondo tú también lo sabes. Porque seguro que lo has hecho alguna otra vez o quizás más de una, ahora será igual.
Juntos haremos esto posible. Lo único que puedo hacer por ti es darte mucha energía para que sigas caminando, avanzando, que no te pares. Que podemos con esta situación y mucho más.
Has llegado hasta aquí, y te tienes que felicitar, yo te felicito, por el esfuerzo que haces cada día, por la recompensa que conseguirás saliendo de esta situación. Y cuando te quieras rendir, porque no puedas luchar más, cuando te sientas cansado, coge mi mano y te daré fuerzas para seguir. Tiraré de ti para continuar. Te acompañaré siempre que lo necesites. No importa la distancia quiero que te sientas acompañado. Ahora y aquí te puede parecer que estás solo. Nuestros sentidos nos engañan. En realidad, no es así. Todos estamos juntos en esto, todos luchando nuestra propia batalla, pero juntos. Tú, aquí; tu enfermera, la suya; y yo, la mía. Todos buscando y encontrando nuestra fuerza interior para afrontar esta nueva situación, que superaremos. Y entonces, continuaremos recogiendo instantes que nos harán sonreír y que ayudarán a recargar esta nuestra fuente de energía. Nuestra fuerza interior. Que nos ayudó a salir de esta y que lo hará en el futuro. Preparada para cuando la tengamos que necesitar de nuevo.
Quiero terminar diciéndote que cada día a las ocho de la tarde aplaudimos desde los balcones y ventanas para hacer saber a los sanitarios y servicios imprescindibles y todas aquellas personas que están haciendo lo imposible para salir adelante, que estamos con ellos. Intentando dar el máximo de energía positiva para que puedan continuar un día más. Esto también te incluye a ti, a todos los enfermos igual que tú, que también están haciendo lo imposible para curarse y volver a casa.
De todo corazón, deseo que mejores y que puedas volver a casa pronto y aplaudir (aplaudirte) desde tu balcón o ventana, con el mejor de las sonrisas gracias a tu fuerza interior.
Un abrazo con mucho afecto.
Una desconocida.
Mi nombre en Marta Comella, tengo 26 años y soy de Barcelona. Hace unos días me enteré de esta bonita iniciativa de escribir una carta a uno de los pacientes que está ingresado por el Covid19. Tengo que confesar que al principio se hace raro escribir a un desconocido, pero espero que notes el cariño de estas líneas y te sean de consuelo en estos momentos tan duros y difíciles.
En una situación así, no sé que puede animarte, pero te voy a contar un poco sobre mí. Soy la mayor de cinco hermanos y el pequeño es un niño de siete años, se llama Tomás. No sé si tienes la suerte de tener niños en la familia, ya sean hijos, sobrinos o nietos, te animo a pensar en ellos o en algún momento de tu infancia. Al pensar en ellos, es difícil no sonreír. En estos días de confinamiento ven las cosas más simples y sencillas y saben vivir el día a día. No se preocupan de la situación económica, ni de qué pasará después. Ellos VIVEN.
Con mi hermano Tomás hemos escrito una lista de cosas para hacer durante estos días de cuarentena. Cada noche, al acostarlo me pide revisar la lista para ver qué más podemos apuntar y qué hemos hecho ya. La lista es larguísima e incluye cocinar un pastel, hacer manualidades, terminar un puzle, ver su película favorita, jugar a juegos de mesa… no para de soñar y pensar cómo pasar este tiempo juntos. Esta noche volveremos a revisar la lista y yo le contaré que te he escrito esta carta. Después de revisar la lista, rezamos cada noche un Padrenuestro y esta noche pediremos por ti: para que te sientas acompañado/a y sepas que desde un piso de Barcelona estamos enviándote muchos ánimos para seguir luchando. No sé si crees en Dios, nosotros tenemos mucha fe en que esto pasará y pedimos mucho por todos vosotros, por vuestras familias y los médicos y enfermeros que os cuidan.
Un abrazo fuerte, con cariño,
Marta
¡Hola valiente!
¿Qué tal te encuentras hoy? Vamos a ver si nos distraemos un poquito juntos. Hoy es un día menos para salir de allí ¿sabes? Así que no desesperes, que tienes alrededor a mucha gente que te cuida. Sí, esos que van con bata. ¡Qué haríamos sin ellos!.
Hoy me ha llegado por casualidad un audio de un pasodoble que ha escrito Manuel Carrasco (no sé si serás fan o si te parecerá un horror, a mi me encanta) que habla sobre esta situación que estamos viviendo y lo que nos espera cuando todo esto acabe. He sacado la letra parando y escuchando (como antiguamente) para transcribírtela a ti y de paso tenerla yo. A ver si te gusta y te saca una sonrisa:
“Quedan un millón de abrazos, queda un millón de miradas, un millón de atardeceres, un
paseo por la playa.
Quedan tantas madrugadas, con olor de primavera, quedan sueños incumplidos, contigo
amaneciendo a mi vera.
Mil mundos por descubrir, fuera de casa, fuera de casa.
Mil canciones para ti, en mi garganta, de mi garganta.
Mil besos que poder dar, mientras el salitre baña el universo de tu cuerpo.
Queda una cerveza detrás de otra con los amigos.
Quedan Noche Buena, mis Reyes Magos, queda ver crecer a nuestros chiquillos.
Queda reírse de lo vivido. Queda una galaxia, mil aventuras, nos queda agarrarnos de la
mano por ver el futuro que al salir nos encontremos.
Que vida tan solo hay una y contigo de la mano para vivirla, solo nos queda un día, un día
menos.”
¿Qué tal, te ha gustado? Me encantaría que pensaras en eso. En todo lo que te queda por
disfrutar. Así que sé fuerte, por ti y por los que te esperan con los brazos abiertos en casa.
No te rindas. Que tenemos pendiente una cerveza en cualquier terraza, te dejo elegir a ti el
sitio.
Nos vemos en la calle.
Con cariño.
Bon dia, em dic Xavi Bosch i tinc 16 anys.
Des de fora de l’hospital li vull desitjar una ràpida recuperació, que de ben segur que se’n sortirà.
Cada dia a les 20:00h sortim tots als nostres balcons o jardins a aplaudir, un aplaudiment que va dirigit a tots els sanitaris que estan donant el 100% perquè tot això s’acabi el més aviat possible, i també i especialment per tots vosaltres, els malalts, perquè esperem que us cureu i puguem tornar tots a la normalitat, que això d’estar a casa tancats o a l’hospital ningú ho vol… Tots els meus ànims per seguir endavant!
Una forta abraçada i molta salut!
Hola bones! Soc en Xavi i tinc 16 anys.
Des de fora de l’hospital li vull donar tots els meus ànims perquè tingui una ràpida recuperació, que de ben segur que se’n sortirà.
Sé que està passant per un moment complicat, com moltes altres persones, però això no ha de fer que baixem el cap i ens donem per vençuts, sinó tot el contrari! Ara més que mai, hem de tenir ganes de recuperar-nos tots d’aquesta situació, especialment els malalts, i ja veurà que d’aquí poc ja tornarà tot a la normalitat, que és el que tots volem. Li desitjo tot el millor per a vostè i la seva família!
Una forta abraçada i molta salut!
CARTA A UN PACIENT....
Hola estimat/da,
El primer que et vull dir és que ets un/a valent/a, que malgrat el virus t’hagi enxampat tu estàs aquí, resistint! I estic segura que continuaràs així fins que el vencis... Per què? Doncs perquè tens al teu voltant un munt de professionals i voluntaris que t’ajuden i et cuiden i t’animen cada dia que passa, que malgrat potser estiguis lluny de la teva família, dels teus amics, dels teus éssers estimats estic convençuda que estan pensant amb tu i cada dia que passa és un dia més que has vençut!!!
Tot passa, i potser ara penses que estàs cansat d’estar al llit, sense sortir, fins i tot no et trobes massa bé però.... tot s’acaba i això té un fi, i el fi és que sortiràs de l’hospital i tornaràs on estaves!
Quan estiguis trist, cansat o avorrit tanca els ulls i visualitza... un lloc on et sentis bé, segur, còmode, content, una situació que recordis bonica, feliç.... i pensa-hi una estoneta...segur que després et sentiràs una mica millor, pensar en positiu ajuda!
Molts ànims de tot cor estimat pacient... recupera’t ben aviat que hi ha gent que t’espera fora i té ganes de veure’t!
Desitjo de tot cor que et recuperis ben aviat, una abraçada ben forta des de Girona!
ÀNIMS, TU POTS!!!
Ester
Este es un mensaje de ánimo para tí. No nos conocemos, pero yo pienso mucho en tí y en todas las personas que estáis en esta complicada situación.
Pienso en lo difícil que tiene que ser y en lo que deseo que te cures pronto, que salgas y que volvamos a disfrutar de la vida como antes.
Yo mientras tanto me quedo en casa por todos vosotros y pidiendo cada día que esto acabe pronto y que todos juntos salgamos de esto más fuertes que nunca.
Mucha mucha fuerza y ánimo de todo corazón.
Un abrazo virtual con todo el cariño del mundo,
Beatriz, desde Zaragoza.
Querida amiga o amigo:
Lo primero y casi único que quiero darte es un abrazo…el abrazo más próximo, más fuerte, más estrecho, más prohibido en estos días, que sea capaz de transmitir todo mi ánimo, todo mi apoyo, toda mi fuerza y esperanza.
Sin dejar de abrazarte te digo que no estás solo, ahora mismo te están rodeando varios círculos giratorios que generan una fuerza imperceptible pero poderosa que conseguirá sacarte de allí. El primero y más cercano está formado por los excelentes profesionales sanitarios que se dejan el alma para curarte. En una órbita exterior están tu familia, tus amigos, las personas que te quieren, todos ellos pensando en ti, y sobre todo esperándote, preparándolo todo para tu regreso. El último círculo lo formamos el resto, personas a las que no conoces y que no te conocen, anónimas, pero que quieren ponerse en tu lugar, quieren agarrar fuerte tu brazo y traerte de nuevo con nosotros.
En estos días encerrados nos angustiamos, porque nos gustaría hacer algo más por ti. A mí me ayuda recordar lo importante, las cosas que pronto disfrutarás… La conversación con un amigo, que te acaricia alma y recuerda lo mejor de ti, la luz del atardecer, la intimidad con quien amas, el agua templada del Mediterráneo, el frio en la cara y la satisfacción desde una cumbre del Pirineo… todo esto te está esperando, no lo olvides.
Quiero pensar que muy pronto, cuando salgas, pasearás por la calle, disfrutando entre la gente, y de pronto, cruzarás la mirada con unos ojos que te sonreirán cómplices, esos ojos podrían ser los míos, un ciudadano anónimo que ahora está pensando en ti y sin dejar de abrazarte susurra:
¡Ánimo amigo/a, lucha! ¡Te estamos esperando! ¡Tienes tanto por vivir!
Hola querido amigo,
Este es el último empujón, ¡ya no queda nada! En menos de lo que tu te esperas ya estarás de nuevo en tu casa con tu familia. Porque sí, los datos ya son muy esperanzadores y todo indica que ya queda poco para que ganemos esta batalla.
Han sido muchos días de incertidumbre, tristeza y agonía. Pero también han sido días de solidaridad, reflexión y cariño. No hay mal que por bien no venga. Seguro que este tiempo te ha servido para reflexionar y valorar algunas cosas que igual antes no nos dábamos cuenta de lo importantes que eran. Ya bien sea un abrazo, un qué tal estás o incluso el simple gesto decir más te quiero.
Todos estamos llevando una cruz a cuestas en esta pandemia, ya sea por una cosa u otra. Pero lo que está claro es que tanto vosotros, como todo el equipo sanitario que os cuida sois HÉROES. Por eso no nos cansaremos de aplaudir todos los días, por eso no pararemos nunca de rezar por vosotros y por eso vamos a conseguir salir de esta.
Si me permites, me encantaría poder darte un consejo, y es que para mí la música está siendo mi vía de escape. Todos los días dedico un tiempo del día a escuchar música y dejar mi mente despejada. Te lo aconsejo, porque salen pensamientos realmente increíbles y psicológicamente desconectas de todo lo que te rodea.
Por favor, nunca lo olvides. ESTAMOS CON VOSOTROS.
Desde tierras mañas quiero mandarte un caluroso y cariñoso abrazo. Juntos vamos a salir de esta más pronto de lo que esperas. Mucho ánimo y recuerda, ya queda menos para comerte el mundo.
¡Resistiremos valientes!
Tu amiga maña.
Querido enfermo:
Me llamo Araceli. No sé si me estoy dirigiendo a un hombre o a una mujer, a una persona joven o adulta a un enfermo grave o a otro que no lo está tanto. Lo que sí puedo decir es que mi mensaje sería el mismo para todos: tranquilos, lo único que estáis viviendo es un mal sueño, una especie de pesadilla en la que vosotros sois los protagonistas, una especie de película surrealista que por arte de birlibirloque se ha hecho realidad. Yo tb viví una pesadilla de este tipo cuando tenía 7 años. Debido a una meningitis me dieron sólo un 5% de posibilidades de vivir… Ahora tengo 56, estoy casada y tengo 2 maravillosas hijas. Como siempre dice mi madre, no era mi momento todavía, como tampoco lo es el vuestro. Cuando echo la vista atrás me doy cuenta de lo afortunada que fui por poder superar esa pesadilla, por la excepcional oportunidad que me volvió a dar la vida y por la que aún no he dejado de dar gracias. Vosotros todavía estáis en ese momento de oscuridad en el que tenéis miedo, incertidumbre, inseguridad pero ….. yo os puedo decir que os agarréis como yo me agarré a esa esperanza, a esa luz brillante que existe al final del túnel. Porque de las enfermedades se sale, ya lo creo que se sale y además renovados, con más fuerzas con más ilusión por la vida y con mucho agradecimiento… agradecimiento a todas estas personas que están luchando con y por vosotros todos los días, esos ángeles sin alas que no van a dejar que caigáis, que os van a empujar a mejorar con esa sonrisa, con esas palabras que necesitáis en los momentos de bajón… porque sois humanos y esos momentos existen… y son tan difíciles de evitar… Pero esto va a ayudaos, a vosotros y a los vuestros, vais a sobrevivir a algo que nadie esperábamos y que nos ha cogido a todos por sorpresa. Pero como alguien dijo para eso están los retos para superarlos y eso es lo que estáis haciendo vosotros saltarlos y superarlos, un día más en la vida un día más cerca de vuestra cura.
Yo os aconsejaría paciencia, mucha paciencia y que tengáis muchos pensamientos positivos. Intentad recordad algo de vuestro pasado que os hizo felices: la primera vez que descubristeis un amanecer, el primer beso con la persona amada, esa bonita sorpresa que os dieron y que no esperabais, ese paseo por la playa o por el pueblo hablando con un ser querido, la sonrisa de un niño,…… Son tantos los momentos que quizá olvidasteis pero que se vienen a asomar ahora otra vez!! Dejadlos entrar en vuestras vidas de nuevo porque eso os ayudará a superar esta especie de viacrucis por el que estáis pasando. Recordarlo todo y dejad que poco a poco la vida fluya y que un día al final podáis oír eso de YA ESTÁ CURADO, PUEDE IRSE A CASA!!
Un beso enorme para ti, mi enfermo anónimo.
¡Hola desconocido o desconocida!
Ya sé que soy una desconocida para ti y tu un desconocido para mí, sin embargo, estoy segura que nos parecemos más de lo que los dos pensamos.
Una de las cosas que nos une es la fuerza interior. Estoy aquí para recordarte que todo el mundo tiene la suya y tú también.
Búscala, encuéntrala, mira dentro de ti. La vida te ha ido regalando miles de instantes que llevas en el corazón, en el pensamiento. Están aquí, utilízalos para iluminar este camino que ahora puede ser oscuro. Un momento de alegría, una caricia, un beso. Un rayo de sol, la brisa en la cara o aquella canción. Un abrazo de tu madre, poner los pies en el agua del mar, olor a tierra mojada o hierba recién cortada. Aquel café con algún amigo, aquellos chistes del compañero de trabajo ... Cualquier fotografía que te haga sentir bien, que te haga sonreír.
Es el momento perfecto para encender tu luz, tu fuerza interior. Sólo cree en ti, y en el que llevas dentro. En momentos difíciles, muy difíciles como el que estamos viviendo ahora, solemos tener la sensación de que no podemos más, que nos faltan fuerzas, que es imposible. Y entonces alguien nos recuerda que cree en ti, en tu fuerza, sabe que puedes un poquito más y te recuerda que lo puedes hacer, que podemos salir de esta. Solamente es necesario que alguien te dé un toque, y seas consciente. ¡Y sí, claro que sí! puedes un poquito más. Estoy aquí para recordarte que puedes, que eres mucho más fuerte de lo que crees, yo lo creo y tú ahora que lo sabes, también te lo puedes creer; porque en el fondo tú también lo sabes. Porque seguro que lo has hecho alguna otra vez o quizás más de una, ahora será igual.
Juntos haremos esto posible. Lo único que puedo hacer por ti es darte mucha energía para que sigas caminando, avanzando, que no te pares. Que podemos con esta situación y mucho más.
Has llegado hasta aquí, y te tienes que felicitar, yo te felicito, por el esfuerzo que haces cada día, por la recompensa que conseguirás saliendo de esta situación. Y cuando te quieras rendir, porque no puedas luchar más, cuando te sientas cansado, coge mi mano y te daré fuerzas para seguir. Tiraré de ti para continuar. Te acompañaré siempre que lo necesites. No importa la distancia quiero que te sientas acompañado. Ahora y aquí te puede parecer que estás solo. Nuestros sentidos nos engañan. En realidad, no es así. Todos estamos juntos en esto, todos luchando nuestra propia batalla, pero juntos. Tú, aquí; tu enfermera, la suya; y yo, la mía. Todos buscando y encontrando nuestra fuerza interior para afrontar esta nueva situación, que superaremos. Y entonces, continuaremos recogiendo instantes que nos harán sonreír y que ayudarán a recargar esta nuestra fuente de energía. Nuestra fuerza interior. Que nos ayudó a salir de esta y que lo hará en el futuro. Preparada para cuando la tengamos que necesitar de nuevo.
Quiero terminar diciéndote que cada día a las ocho de la tarde aplaudimos desde los balcones y ventanas para hacer saber a los sanitarios y servicios imprescindibles y todas aquellas personas que están haciendo lo imposible para salir adelante, que estamos con ellos. Intentando dar el máximo de energía positiva para que puedan continuar un día más. Esto también te incluye a ti, a todos los enfermos igual que tú, que también están haciendo lo imposible para curarse y volver a casa.
De todo corazón, deseo que mejores y que puedas volver a casa pronto y aplaudir (aplaudirte) desde tu balcón o ventana, con el mejor de las sonrisas gracias a tu fuerza interior.
Un abrazo con mucho afecto.
Una desconocida.
Abril, 2020
Hola, Mi nombre en Marta Comella, tengo 26 años y soy de Barcelona. Hace unos días me enteré de esta bonita iniciativa de escribir una carta a uno de los pacientes que está ingresado por el Covid19. Tengo que confesar que al principio se hace raro escribir a un desconocido, pero espero que notes el cariño de estas líneas y te sean de consuelo en estos momentos tan duros y difíciles.
En una situación así, no sé que puede animarte, pero te voy a contar un poco sobre mí. Soy la mayor de cinco hermanos y el pequeño es un niño de siete años, se llama Tomás. No sé si tienes la suerte de tener niños en la familia, ya sean hijos, sobrinos o nietos, te animo a pensar en ellos o en algún momento de tu infancia. Al pensar en ellos, es difícil no sonreír. En estos días de confinamiento ven las cosas más simples y sencillas y saben vivir el día a día. No se preocupan de la situación económica, ni de qué pasará después. Ellos VIVEN.
Con mi hermano Tomás hemos escrito una lista de cosas para hacer durante estos días de cuarentena. Cada noche, al acostarlo me pide revisar la lista para ver qué más podemos apuntar y qué hemos hecho ya. La lista es larguísima e incluye cocinar un pastel, hacer manualidades, terminar un puzle, ver su película favorita, jugar a juegos de mesa… no para de soñar y pensar cómo pasar este tiempo juntos. Esta noche volveremos a revisar la lista y yo le contaré que te he escrito esta carta. Después de revisar la lista, rezamos cada noche un Padrenuestro y esta noche pediremos por ti: para que te sientas acompañado/a y sepas que desde un piso de Barcelona estamos enviándote muchos ánimos para seguir luchando. No sé si crees en Dios, nosotros tenemos mucha fe en que esto pasará y pedimos mucho por todos vosotros, por vuestras familias y los médicos y enfermeros que os cuidan.
Un abrazo fuerte, con cariño,
Marta
¡Hola valiente!
¿Qué tal te encuentras hoy? Vamos a ver si nos distraemos un poquito juntos. Hoy es un día menos para salir de allí ¿sabes? Así que no desesperes, que tienes alrededor a mucha gente que te cuida. Sí, esos que van con bata. ¡Qué haríamos sin ellos!.
Hoy me ha llegado por casualidad un audio de un pasodoble que ha escrito Manuel Carrasco (no sé si serás fan o si te parecerá un horror, a mi me encanta) que habla sobre esta situación que estamos viviendo y lo que nos espera cuando todo esto acabe. He sacado la letra parando y escuchando (como antiguamente) para transcribírtela a ti y de paso tenerla yo. A ver si te gusta y te saca una sonrisa:
“Quedan un millón de abrazos, queda un millón de miradas, un millón de atardeceres, un
paseo por la playa.
Quedan tantas madrugadas, con olor de primavera, quedan sueños incumplidos, contigo
amaneciendo a mi vera.
Mil mundos por descubrir, fuera de casa, fuera de casa.
Mil canciones para ti, en mi garganta, de mi garganta.
Mil besos que poder dar, mientras el salitre baña el universo de tu cuerpo.
Queda una cerveza detrás de otra con los amigos.
Quedan Noche Buena, mis Reyes Magos, queda ver crecer a nuestros chiquillos.
Queda reírse de lo vivido. Queda una galaxia, mil aventuras, nos queda agarrarnos de la
mano por ver el futuro que al salir nos encontremos.
Que vida tan solo hay una y contigo de la mano para vivirla, solo nos queda un día, un día
menos.”
¿Qué tal, te ha gustado? Me encantaría que pensaras en eso. En todo lo que te queda por
disfrutar. Así que sé fuerte, por ti y por los que te esperan con los brazos abiertos en casa.
No te rindas. Que tenemos pendiente una cerveza en cualquier terraza, te dejo elegir a ti el
sitio.
Nos vemos en la calle.
Con cariño.
Bon dia, em dic Xavi Bosch i tinc 16 anys.
Des de fora de l’hospital li vull desitjar una ràpida recuperació, que de ben segur que se’n sortirà.
Cada dia a les 20:00h sortim tots als nostres balcons o jardins a aplaudir, un aplaudiment que va dirigit a tots els sanitaris que estan donant el 100% perquè tot això s’acabi el més aviat possible, i també i especialment per tots vosaltres, els malalts, perquè esperem que us cureu i puguem tornar tots a la normalitat, que això d’estar a casa tancats o a l’hospital ningú ho vol… Tots els meus ànims per seguir endavant!
Una forta abraçada i molta salut!
Hola bones! Soc en Xavi i tinc 16 anys.
Des de fora de l’hospital li vull donar tots els meus ànims perquè tingui una ràpida recuperació, que de ben segur que se’n sortirà.
Sé que està passant per un moment complicat, com moltes altres persones, però això no ha de fer que baixem el cap i ens donem per vençuts, sinó tot el contrari! Ara més que mai, hem de tenir ganes de recuperar-nos tots d’aquesta situació, especialment els malalts, i ja veurà que d’aquí poc ja tornarà tot a la normalitat, que és el que tots volem. Li desitjo tot el millor per a vostè i la seva família!
Una forta abraçada i molta salut!
CARTA A UN PACIENT....
Hola estimat/da,
El primer que et vull dir és que ets un/a valent/a, que malgrat el virus t’hagi enxampat tu estàs aquí, resistint! I estic segura que continuaràs així fins que el vencis... Per què? Doncs perquè tens al teu voltant un munt de professionals i voluntaris que t’ajuden i et cuiden i t’animen cada dia que passa, que malgrat potser estiguis lluny de la teva família, dels teus amics, dels teus éssers estimats estic convençuda que estan pensant amb tu i cada dia que passa és un dia més que has vençut!!!
Tot passa, i potser ara penses que estàs cansat d’estar al llit, sense sortir, fins i tot no et trobes massa bé però.... tot s’acaba i això té un fi, i el fi és que sortiràs de l’hospital i tornaràs on estaves!
Quan estiguis trist, cansat o avorrit tanca els ulls i visualitza... un lloc on et sentis bé, segur, còmode, content, una situació que recordis bonica, feliç.... i pensa-hi una estoneta...segur que després et sentiràs una mica millor, pensar en positiu ajuda!
Molts ànims de tot cor estimat pacient... recupera’t ben aviat que hi ha gent que t’espera fora i té ganes de veure’t!
Desitjo de tot cor que et recuperis ben aviat, una abraçada ben forta des de Girona!
ÀNIMS, TU POTS!!!
Ester
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